El kéfir es conocido por estar entre las bebidas más saludables que hay, la cual tiene una textura y sabor parecida a la que posee el yogur.
¿En qué consiste el kéfir?
El kéfir se trata de una bebida fermentada mediante la acción de un conjunto tanto de bacterias como de levaduras, cuyo origen se remonta a tiempos ancestrales (se piensa que proviene del Cáucaso) y la cual es posible fermentar con leche o agua azucarada, siendo este aspecto el que determina el tipo de kéfir obtenido, el cual puede ser estilo yogurt o de agua.
Cabe mencionar, que es una bebida que cuenta con probióticos, los cuales consisten en microorganismos muy populares debido a los numerosos beneficios que ofrecen sobre la salud.
En este sentido, distintas investigaciones indican que poseen grandes propiedades antioxidantes, ayudan a las digestiones lentas, ofrecen un efecto diurético, permiten depurar el organismo y se deshacen de las toxinas, disminuyen la inflamación gastrointestinal y promueven la absorción de nutrientes.
Propiedades de esta bebida
Aunque este es un aspecto que podría variar de acuerdo a su preparación, es decir, si se utiliza leche o agua, lo cierto es que en ambos casos la bebida resultante cuenta con un gran contenido de probióticos.
Al utilizar leche para su fermentación, además de tener las bacterias buenas, el kéfir incluye proteínas, calcio e incluso vitaminas (grupo B y K2). De igual manera, pero en menor porcentaje, cuenta con minerales (fósforo y potasio) y biotina, vitaminas A y D.
De igual modo, cabe mencionar que los gránulos de kéfir poseen alrededor de 400 millones de microorganismos en cada gramo, entre los cuales un 50% consisten en bacterias tipo Lactobacillus, las cuales ayudan a proteger el organismo frente a las bacterias dañinas.
También es apropiado decir que una propiedad única que posee esta bebida consiste precisamente en su contenido de kefiran, un polisacárido insoluble que actúa como un poderoso antimicrobiano natural.
¿Cuáles son los beneficios que ofrece el kéfir?
Diferentes estudios avalan que la ingesta periódica de kéfir, entre otras cosas, se encuentra vinculada a una mejora tanto en el proceso de digestión como en el nivel de tolerancia frente a la lactosa, al igual que con un mayor control de la glucosa plasmática, un mejor efecto antibacteriano y antihipertensivo.
Teniendo eso en cuenta, dentro de los principales beneficios que proporciona esta bebida, pueden destacarse los siguientes:
Efecto probiótico
Las bacterias lácticas ayudan a proteger las mucosas del intestino, al mismo tiempo que se encargan de repoblar la microflora intestinal. Asimismo, optimiza el sistema inmune, la salud del colon y también mejora las paredes intestinales.
Acción defensiva
Permite hacer frente a las infecciones, por ejemplo, el Heliocobater pylori, que se encuentra asociado tanto con las úlceras gastroduodenales como con la gastritis. De acuerdo con expertos, ingerir unos 250ml de esta bebida, 2 veces diarias, promueve la eliminación de dicha bacteria.
Reduce el colesterol
Actúa de 3 diferentes maneras, ayudando a disminuir la absorción en el intestino, mantiene la flora intestinal sana para que logre degradar el colesterol y evita su producción a través del hígado.
Optimiza la digestión
Ayuda a evitar las molestias intestinales y también las flatulencias, al mismo tiempo que promueve la digestión.
Debido a que consiste en un alimento fermentado, cuenta con proteínas en forma de aminoácidos, por lo que son más sencillas de absorber, digerir y tolerar por el organismo.
Protector antimicrobiano
Fomenta la defensa de bacterias patógenas, las cuales podrían contaminar la leche, por ejemplo, Helicobacter, Salmonella, Candida albicans, Shigella y Staphylococcus.
Alivia la gastroenteritis
Ofrece al organismo probióticos que permiten hacer frente a la infección, al mismo tiempo que acelera el proceso de sanación en casos de colitis y reduce la duración de la diarrea.
Ofrece valiosos nutrientes
Le proporciona al organismo los nutrientes tanto de la leche como de los fermentos, entre los que se incluyen las proteínas, fósforo, calcio y las vitaminas B6, B12 y K.
Anticancerígeno
Investigaciones in-vitro señalan que el kéfir cuenta con compuestos que podrían ayudar a eliminar las células cancerígenas y prevenir la proliferación de los tumores.
Y si bien los estudios aún están en sus etapas iniciales, se considera que el consumo de esta bebida podría resultar beneficioso para hacer frente a diversos tipos de cáncer, por ejemplo, el de estómago, de colon y de mama.
¿Qué tipos de kéfir existen?
A pesar de que el kéfir de leche destaca por ser el más conocido y también el más antiguo, lo cierto es que también existen otros tipos que conviene conocer, por ejemplo, los siguientes:
- Kéfir de leche: Se distingue por ser el más antiguo, famoso y consumido. Al estar preparado con leche, posee un agradable sabor, parecido al que tiene el yogur, por lo que es igualmente llamado “yogur búlgaro” y/o “leche kefirada”.
- Kéfir de agua: Elaborado especialmente con agua y cepas, no incluye leche en su composición, por lo que suele ser tolerado de mejor manera por aquellas personas que presentan intolerancia a la lactosa y/o quienes no suelen consumir leche de vaca.
- Kéfir de té (té combucha): Utiliza cepas distintas en su preparación y se elabora a través de un proceso diferente, ya que durante su fermentación se suele mantener sin tapar el recipiente, algo que le permite adquirir otras particularidades.